Mascara de Caballo Rojo 2

Tamaño: 36 x 19 x 10 cm

Todas nuestras mascaras están elaboradas manualmente en diferentes tipos de maderas regionales. La mayoría ya han sido utilizadas en ceremonias y bailes, por lo tanto ninguna está libre de pequeñas imperfecciones debidas a su uso y al paso del tiempo pero sobre todo no se hicieron con la intención de ser perfectas.

La mayoría de las máscaras tradicionales en México están hechas de madera, pero también se utilizan cuero, cera, cartón, papel maché y otros materiales. Las representaciones mas comunes en máscaras incluyen europeos (españoles, franceses, hacendados, etc.), afro-mexicanos, ancianos y ancianas, animales, elementos naturales, fantásticos y sobrenaturales. La evidencia de la fabricación de máscaras en el país se extiende durante miles de años y era una parte bien establecida de la vida ritual en México, cuando llegaron los españoles. Los sumos sacerdotes usaban máscaras para encarnar deidades. Entre ellos, los guerreros jaguar y águila se vestían como estos animales para ganar fuerza.

Hoy en día, las máscaras se utilizan en una amplia variedad de ceremonias, festivales, procesiones y teatro, pero más a menudo en bailes tradicionales, que son una forma de teatro, con personajes, historia, música e intérpretes no profesionales. Básicamente, cualquier persona que desee participar puede formar parte de un grupo de baile. El propósito de las máscaras es convertir a los participantes en otros seres, permitiendo que la persona se exprese como si fuera otro, desconocido para el público. En muchos bailes, si un bailarín no usa una máscara, a menudo usa lentes oscuros para indicar que no es su “yo normal”. Con pocas excepciones, los bailes de máscaras son realizados por hombres, que desempeñan papeles tanto masculinos como femeninos. La razón de esto es que no se consideraba apropiado que las mujeres en Europa actuaran o bailaran, una prohibición traída a México por los españoles.